Por lo general, cuando iniciamos una vida activa, desconocemos por completo por dónde empezar. En cuanto a cardio, normalmente tenemos dos opciones principales que encontramos en todos los gimnasios y tiendas fitness: la caminadora y la elíptica.
En este artículo te ayudamos a resolver todas las dudas que tengas sobre estas dos máquinas: ¿cuáles son sus beneficios? ¿Cuál es más efectivo para adelgazar? ¿Cuál tiene menos impacto en nuestras articulaciones?
En términos generales, tanto en la elíptica como en la caminadora puedes quemar la misma cantidad de calorías. Es decir, quemas alrededor de 200 y 400 calorías por hora, dependiendo de tu nivel físico. Sin embargo, existen otros puntos cruciales que debes tomar en cuenta.
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Diferencias entre la caminadora y la elíptica
Beneficios de la elíptica:
La máquina elíptica es ideal para trabajar no solo los músculos de las piernas, sino también los pectorales, deltoides, bíceps y tríceps. A diferencia de la caminadora, las probabilidades de lesiones en rodillas y tobillos son mínimas puesto que los pies siempre están en contacto con el aparato. También es una opción para no ejercer mayor presión sobre la cadera y la columna.
Cuando realizas cardio con la elíptica puedes variar la intensidad. Adicionalmente, si quieres enfocar el trabajo en los músculos cuádriceps puedes soltar las barras y mover los pedales hacia atrás.
En general, es una máquina ideal para las personas que se están recuperando de una lesión y no quieren un entrenamiento de alto impacto. También es perfecta para las personas que padecen de sobrepeso y no tienen un alto rendimiento físico.
Beneficios de la caminadora:
A diferencia de la elíptica, el movimiento de la caminadora es mucho más sencillo de realizar. Puedes variar la modificación y velocidad para nivelar la intensidad que desees.
En general, con la caminadora trabajas todo el contorno corporal porque su trabajo es muy proporcionado. Es ideal para la coordinación y la concentración.
Según un estudio de la Universidad de California de Estados Unidos, la caminadora activa tu cerebro de manera óptima, por lo que puede controlar el aprendizaje de recompensa y motivación.
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Recomendaciones generales
Para concluir, es necesario que verifiques tu estado de salud física y tu rendimiento. Si buscas una máquina que no tenga tanto impacto en tus rodillas, lo mejor es que empieces con la elíptica.
Si, por otro lado, buscas no solo entrenar tu salud física sino también mental, la caminadora puede llegar a ser una verdadera aliada.
Los especialistas recomiendan alternar entre estas dos máquinas para que los músculos y tendones no se acostumbren a un movimiento y, de esta forma, desarrollar por ejemplo una tendinitis.