¿Estás cansada de comer papas fritas cada vez que preparas hamburguesas? Te proponemos otro contorno igual de delicioso: aros de cebolla.
Este aperitivo es el favorito de muchísimas personas y suele encontrarse en el menú de las cadenas de comida rápida.
Te vamos a enseñar cómo prepararlos y puedas lograr hacer la misma textura crujiente desde la comodidad de tu cocina.
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¿Cuál es el origen de los aros de cebolla?
El origen exacto de este platillo es desconocido. Sin embargo, en 1933 hubo un anuncio de esta receta en la revista de ‘The New York Times’, pero los restaurantes ‘Pig Stand’ reclaman ser los inventores de los aros de cebolla en la década de los años 20.
Por lo tanto, esto quiere decir que sus raíces son estadounidenses. Lo que sí sabemos con certeza, es que se consumen en muchísimos países.
Los aros de cebollas se cortan de forma transversal para que puedan tener la forma de un anillo y son rebozados en harina con levadura. Posteriormente se ponen a freír en aceite. El resultado es que queden crujientes.
Tips para hacer la receta de aros de cebolla
Una vez que tengas en el sartén, tienes que dejar que se doren. Debes estar pendiente que se cocinen en cada lado, debes voltearlos cada cierto tiempo. Te recomendamos que lo hagas con tenedor.
El tenedor es un buen utensilio para poder hacer este procedimiento, porque te ayudará a integrar la mezcla que te explicamos en las instrucciones y puedas escurrir el exceso de aceite.
Durante esa fase, te aconsejamos que uses una bandeja grande que esté cubierta con papel absorbente para que los aros de cebolla vayan perdiendo el exceso de grasa. Solo tienes que dejarlos allí por unos minutos.
Luego que hayas hecho ese paso, ya los aros de cebolla estarán listos para degustarlos. Puedes espolvorear un poco de sal y pimienta. No olvides añadirle una salsa para que tengas una combinación deliciosa.
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Ingredientes
- 2 cebollas medianas
- 250 gr de harina
- 300 ml de agua
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 1 cucharada de levadura
- Pan rallado
- Sal
- Aceite de oliva
Instrucciones
- Comienza a pelar las cebollas, quítales la primera capa y córtalas en rodajas finas, te recomendamos que el grosor sea de 1 cm para que tenga forma de aro.
- Separa con los dedos las diferentes capas de la cebolla para conseguir los aritos.
- Luego, mete los aros de cebolla en agua fría por 30 minutos.
- Toma un bol, allí vas a mezclar la harina, la levadura y agua fría, agrega una cucharadita de sal y de pimentón. Integra todo con un tenedor hasta que quede una crema sin grumos, debe tener cierto espesor y ser líquido.
- Escurre los aros de cebolla, le echas una pizquita de sal e introdúcelos en la mezcla, asegúrate que queden cubiertos.
- Retira el exceso de masa y luego los pasas por el pan rallado.
- Aparta dos platos, en uno tendrás los aros de cebolla crudos antes de freír y el otro son para los que están listos.
- Ahora procedes a freírlos en abundante aceite de oliva. Esto tomara unos 30 segundos, los retiras y los dejas reposar sobre una rejilla o en una bandeja con papel absorbente.