Los ‘cheat meals’, conocidos en español como comidas trampa, hacen referencia a un método de dieta para salirse un día del plan de alimentación estricto. Generalmente es utilizado durante el proceso de pérdida de peso, pero ¿qué tan saludable es bueno para nuestro metabolismo y salud?
Es importante saber cómo implementar los ‘cheat meals’
Según varios especialistas, darse de vez en cuando una comida trampa no va a repercutir ni en el estado de salud ni en el progreso de la pérdida de peso. Sin embargo, se ha utilizado de manera incorrecta.
Cuando una persona se restringe en la alimentación es posible que esté haciendo una reactancia psicológica en el organismo. Es decir, que posiblemente el cerebro se concentre más en lo que le está faltando hasta llegar a un punto de obsesionarse, en este caso, con la comida. Ahora bien, si esa misma persona tiene un día de ‘cheat meals’ es posible que coma lo que quiera durante una jornada. Seguramente el castigo a ese ‘premio’ al siguiente día sea volver a restringirse con la comida.
Por lo tanto, la persona puede entrar en un bucle en donde come como premio y se restringe como castigo. Uno de los mayores problemas de los ‘cheat meals’ es, por lo tanto, que las personas podrían clasificar la comida como buena y mala.
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De acuerdo con los especialistas, una mejor estrategia que las comidas trampa es entender que no existen alimentos buenos y malos para tu organismo. Por el contrario, todas las comidas son positivas para nuestra salud física y mental. Esta es una mejor premisa para tener una excelente relación con la comida y empezar una vida mucho más saludable.
También es recomendable que durante un proceso de pérdida de peso se tenga presente la salud mental: no obsesionarse con el ejercicio o la comida; mantener un equilibrio de vida; no dejar atrás las salidas con amigos y familiares; y en especial, disfrutar el proceso.