Entre las plantas más hermosas y las ideales para decorar el hogar están las suculentas rojas. Son de fácil cuidado, no necesitan demasiado riego y si las ubicas en lugares específicos; le darán un toque especial.
No solo esto, las suculentas rojas son las plantitas perfectas para que la casa luzca elegante y colorida en cualquier temporada del año acompañada de otras plantas como la Flor de Pascua. ¡Tu casa lucirá magnífica!.
Según el Feng Shui (práctica asiática que determina cuáles son los mejores lugares para decorar atrayendo las buenas energías), estas bellas suculentas ofrecen una carga positiva al hogar. Así que no lo pienses más y anímate a tener una de estas en tu habitación, en la entrada de la casa o en las escaleras.
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Características de las suculentas rojas
Estas llamativas plantitas se pueden conseguir en versión ‘mini’ y hasta las puedes ver con medidas de hasta 25 centímetros de diámetro. Crecen en forma de rosetas con hojas largas y anchas.
Su característica más resaltante es su color rojo brillante y atractivo. Algunas veces en tonos rojos más oscuros.
Lo interesante de integrar suculentas rojas en casa es que después y por todo el año quedará como una plantita más para embellecerla y llenarla de la mejor energía.
Eso sí, para que te dure mucho tiempo; es necesario que la riegues de una forma moderada y que esté ubicada en un lugar donde no reciba iluminación natural directa.
Las suculentas rojas solo les gusta tomar sol por 3 o 4 horas al día para nutrirse, así que trata de no exceder este tiempo para que no se sequen.
Ubícalas en una hermosa maceta
Para darle un toque más chic al espacio donde la ubiques, puedes ponerla en una maceta decorada o puedes forrar la base de la misma con los colores que más te gusten. Puedes utilizar papel rojo, dorado o verde.
También puedes adornarla con un moño de papel brillante como si fuera un regalo y si haces un bello lazo, tu plantita de suculentas rojas será la protagonista de tu casa.
En cuanto a los estilos más minimalistas y para decoraciones más sobrias, ubícala en un recipiente de color blanco y de un material resistente. ¡Se verán bellísimas!.
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