Las tortitas de papa son un clásico de las familias. Además de ser una receta muy fácil de hacer, es económica y saciante. Prácticamente puedes incluir todos los ingredientes que desees y de todo tipo.
No obstante, a pesar de ser muy sencilla de preparar, existen algunas reglas básicas durante su proceso. Es importante seguirlas porque sino podría estropear el resultado de las tortitas de papa.
En este artículo, te mostramos algunos errores comunes durante su proceso y cómo evitarlos.
Recomendaciones claves al preparar las tortitas de papa
Escoge la papa correcta:
La mejor papa para las tortitas es la blanca. Para esto evita que esté muy aguada o vieja, así que consérvalas frescas en el refrigerador.
Un truco infalible para esto es realizar una cama de esponjas en el cajón de la nevera para que estas se encarguen de absorber toda la humedad y protegerlas.
Coce la papas correctamente:
Es importante que utilices una olla profunda con agua para cocinar bien las papas. Otras recomendaciones son:
- Córtalas en trozos pequeños para que se puedan cocinar más rápido.
- Agrega sal y una cucharada de vinagre al agua.
- Corta en forma de cruz cada papa para que se cocine mejor al interior.
- Pincha con un tenedor para que no se pasen de cocidas. Por lo general, las papas medianas estarán perfectas entre 30 y 35 minutos.
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Deja enfriar el puré de papa:
Si dejas reposar el puré de papa, tendrá la textura perfecta y será mucho más fácil poder manipularla.
Así que una vez agregues los ingredientes de tu elección, déjala refrigerar para que al momento de freír esté mucho más firme.
Utiliza la cantidad suficiente de aceite:
Para freír las tortitas de papa no necesitas mucho aceite. Así que no riegues demasiado porque podría estropear el resultado. De hecho podrías usar una capa un poco delgada y tendrías una excelente receta con un buen color y textura.
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Fríe pocas tortitas a la vez y solo voltea una vez:
Uno de los errores más comunes es poner bastantes tortitas en la sartén o la olla. Esto hará que se deshagan, se peguen y terminen como un puré de papa.
Es preferible que empieces por freír poco a poco las tortitas y voltearlas una sola vez cuando ya estén doraditas y perfectas. Otra opción es hacerlas al horno: quedan muy crujientes y sin grasa.