Con una semilla y tierra húmeda puedes germinar ciruelas fácilmente en casa

Después de 20 días comenzará a salir una pequeña raíz de la semilla de ciruela. Luego, debes sembrarla en una maceta para que la planta dé frutos.

Germinar ciruela. Crédito: Pixabay - Freepik

En pocos días puedes germinar ciruela en casa, un proceso rápido y fácil de hacer. Ya sea ciruela roja, ciruela criolla, ciruela de huesito o ciruela negra.

También debes tener en cuenta los cuidados que debes darle cuando las trasplantes a una maceta, tales como el riego, la iluminación y la poda. Si quieres saber cuáles son los cuidados básicos para el ciruelo, puedes leer aquí.

A la hora de la germinación, la ciruela debe estar bien madura. Si la fruta está muy dura o de un color verde, no estará apta para la reproducción.

¿Cómo extraer la semilla de la ciruela para germinarla?

Para obtener el hueso de la fruta, ábrela por la mitad y saca la pepa. Posteriormente, déjala secar a temperatura ambiente durante 24 o 48 horas; esto ayudará a que la cáscara exterior sea más frágil. Este paso es importante, de lo contrario será complicado extraer la semilla del ciruelo.

Cuando haya transcurrido el tiempo indicado, realiza un corte al hueso con la ayuda de un alicate de punta. Hazlo con cuidado para no dañar la pequeña semilla de adentro.

Al sacar la semilla, déjala en un vaso con agua por 24 horas para que pueda absorber la humedad y así germine rápidamente.

Abre la ciruela y reserva la semilla para germinarla. Crédito: Freepik

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Aprende a germinar ciruela fácilmente

Ahora que ya tienes la semilla de la ciruela, ponla en una servilleta previamente humedecida. Puedes mojarla con cualquier fertilizante casero para llenarla de nutrientes.

Después, envuélvela en papel aluminio y guárdala dentro de la nevera. Es esencial que la temperatura del refrigerador esté entre 2 grados o 10 grados centígrados.

Alrededor de 20 días aproximadamente comenzará a salir una pequeña raíz de la semilla de ciruela. Allí es el momento justo para sembrarla en una maceta.

Elige el recipiente adecuado y entierra la pequeña semilla germinada con la raíz hacia abajo. Rellena con suficiente tierra, pon la maceta dentro de casa, riega y espera que tu ciruelo crezca correctamente.

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